Es una de las piedras más conocidas por su energía espiritual y protectora. Se le atribuye la capacidad de aportar calma, serenidad y claridad mental, ayudando a liberar el estrés y a equilibrar las emociones. Es considerada una piedra de sabiduría y transformación, ideal para la meditación y la conexión con la intuición.
En el plano energético, favorece la protección contra energías negativas y potencia la apertura espiritual, acompañando en procesos de autoconocimiento y sanación interior. También ayuda a mejorar la concentración y la toma de decisiones desde un lugar de paz y claridad.
Está especialmente vinculada a los signos Piscis, Virgo y Acuario, a quienes les aporta equilibrio emocional, intuición y crecimiento espiritual.
Signos Zodiacales: Virgo, Acuario, Piscis