se distingue por sus manchas y patrones naturales que evocan la piel de un felino, símbolo de fuerza y protección. Es considerado una piedra de vitalidad y equilibrio, ideal para quienes buscan estabilidad emocional y conexión con la tierra.
En el plano energético, ayuda a mantener el enfoque, disipar la negatividad y aportar confianza en uno mismo. Se le atribuye la capacidad de reforzar la determinación y la perseverancia, convirtiéndose en un aliado en momentos de cambio o desafíos.
Su energía está vinculada al chakra raíz, brindando seguridad y arraigo. Tradicionalmente, se asocia con los signos Leo, Aries y Capricornio, quienes encuentran en él un apoyo para potenciar su fortaleza y autoconfianza.
Signos Zodiacales: Aries, Leo, Capricornio