es una piedra de tonos rosados y vetas blancas que simboliza el amor incondicional y la compasión. Es reconocida como una gema sanadora del corazón, ya que favorece la liberación de emociones reprimidas y ayuda a superar heridas del pasado, fomentando la autoaceptación y el perdón.
En el plano energético, potencia la alegría, la creatividad y la apertura hacia nuevas relaciones, aportando equilibrio emocional y serenidad. También se asocia con el fortalecimiento de la autoestima y la confianza personal, convirtiéndola en una piedra ideal para quienes desean sanar y crecer desde el amor propio.
Su energía se vincula principalmente al chakra corazón, irradiando ternura y armonía. Tradicionalmente, se asocia con los signos Leo, Escorpio y Libra, quienes encuentran en ella un apoyo para cultivar la pasión, la empatía y el equilibrio en sus vínculos.
Signos Zodiacales: Leo, Libra, Escorpio